martes, 21 de octubre de 2008

Depósito municipal - Jordi Cebrián

DEPÓSITO MUNICIPAL
Jordi Cebrián

Se me llevó el coche la grúa por estar mal aparcado. Tardé dos días en ir a retirarlo del depósito municipal, y ya había una familia viviendo dentro. Me explicaron que el ayuntamiento utiliza los coches como albergues provisionales para refugiados de distintos países, acogidos en el nuestro. Mientras pagaba la tasa de la grúa, la multa y diez arbitrios, vi que en el asiento de detrás de mi coche dormían un niño y una niña. También su padre dormía, en el asiento del conductor. La mujer, despierta, me miraba con ojos tristes a través del cristal. Volví en taxi.

Ilustración: Salvador Dalí

2 comentarios:

Jacinto Deleble Garea dijo...

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Este cuento es una joya.

Aparte de bien escrito consigue hacerte reflexionar.

Ha sido todo un placer haberlo leído.

Espero que vengan más.






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Olga A. de Linares dijo...

¡Excelente! Otra muestra de la muy buena escritura de Cebrián, que se destaca no solo en lo formal, sino también en sus contenidos, y nos hace pensar (aunque duela...)